sábado, 8 de octubre de 2011

La psicología del deporte


La psicología del deporte es la rama de la psicología que estudia los procesos psíquicos y la conducta del hombre durante la actividad deportiva.


Esta ciencia aplicada busca conocer y optimizar las condiciones internas del deportista para lograr la expresión del potencial físico y táctico adquirido en el proceso de de preparación.

Los primeros acercamientos entre la psicología y el deporte consistían en consultas de los entrenadores a los psicólogos, donde presentan descripciones de conducta durante la competición en busca de consejos para lograr el autocontrol de los deportistas.
Sin embargo, con el tiempo, la psicología del deporte avanzo y hoy ya se considera que la interacción entre psicólogo y el deportista es algo básico.


De esta forma el psicólogo del deporte ayuda al competidor a controlar el estres, que produce una desorganización emocional y conductual que puede afectar su rendimiento. Por otra parte intenta pasar, de la expectativa del éxito (cuando el deportista siente que su habilidad esta directamente asociada a la victoria del deporte) a la expectativa de eficacia  (para que las acciones y los movimientos técnicos ocupen su atención y sentimientos)

El logro de buenos resultados a partir de la práctica de un deporte depende no solamente del entrenamiento periódico del cuerpo sino también, y de manera fundamental, de una adecuada actitud mental libre de conflictos.

APLICACIONES DE LA PSICOLOGIA DEL DEPORTE:
Los profesionales de la psicología del deporte se interesan por dos objetivos principales:

1-Por un lado, ayudar a los deportistas a utilizar principios psicológicos para mejorar su rendimiento.
2-Por otro lado, comprender cómo la participación en el deporte, ejercicio y actividad física afectan al desarrollo psicológico del individuo, su salud y bienestar a lo largo de su ciclo vital.
Por tanto la Psicología de la Actividad Física y del Deporte se encarga de estudiar los aspectos psicológicos durante la actividad física, sea esta orientada al rendimiento o no. Por tanto diferenciaremos las aplicaciones en:
1-Destinadas al rendimiento: Donde se usan técnicas para desarrollar y perfeccionar habilidades psicológicas que mejoren el rendimiento.
2-No destinadas al rendimiento (iniciación y sociedad): Que tratan de fijar directrices para establecer el ambiente social y el aprendizaje que aumentaran la destreza y el desarrollo de los deportistas.

Aplicaciones en deportistas:

La preparación psicológica de los deportistas incluye la aplicación rigurosa de estrategias apropiadas para conseguir que alcancen un determinado estado mental y realicen una conducta o conjunto de conductas que resulten relevantes para su rendimiento. La preparación psicológica, supone la manipulación de variables psicológicas como la motivación, la auto-confianza, la atención, etc. con el objetivo, en este contexto, de conseguir el rendimiento deportivo y personal más apropiado en cada momento concreto (entrenamientos, competiciones, momentos previos a la competición, periodos de descanso, reuniones entrenador-deportista, etc.).

Aplicaciones en entrenadores y padres de deportistas:
El psicólogo ha de educarlos ayudándoles a optimizar el desarrollo psicosocial de los niños y adolescentes a través de la mejora de la formación de los agentes psicosociales de dichos niños. Además el psicólogo asesorara al entrenador sobre que pautas debe seguir para la motivación de los deportistas en cada momento de la temporada.
Así podrá ayudar al entrenador en la motivación y su estilo de comunicación. En cuanto a los padres deberá ayudar a que mantengan sus buenas expectativas.
Aplicaciones en directivos y aficionados:

El psicólogo puede ayudarles en cuanto el mantenimiento de expectativas, y políticas de respeto y cooperación para llevar de un modo adecuado el ámbito deportivo.

Árbitros y jueces:

El psicólogo puede ayudarles en cuanto a su motivación; el saber soportar las presiones y tensiones que conlleva su trabajo en la competición; así como tomar decisiones adecuadas en momentos de tensión o conflicto; y a saber dialogar y tratar a deportistas, entrenadores, y otros actores que puedan interactuar con ellos.

OBJETIVOS DE LA PSICOLOGIA DEL DEPORTE:

La psicología del deporte estudia fundamentalmente 2 aspectos:
  Los factores psicológicos que influyen en la participación y rendimiento deportivo:
-La motivación.
-El estilo de comunicación del entrenador.
-Las expectativas de los padres.
-La autoconfianza.
-El autocontrol emocional.
-Estilo atencional.

Los efectos psicológicos derivados de la práctica deportiva o de la actividad física:
-Reducción de la ansiedad.
-Mejora del autoestima.
-Mejora de la autoconfianza.

ÁMBITOS DE ACTUACION:

La Psicología del deporte no solo debe limitarse al estudio del deporte competitivo, sino que ha de interesarse también por la practica de la actividad física del deporte como diversión, aventura, o mantenimiento de la condición física de amplias capas de la población en su tiempo de ocio. Por otra parte, tampoco debe reducirse al estudio del deportista, sino que implica el estudio de las diferentes interacciones que se dan en las situaciones deportivas, por lo que nos obliga a tener en cuenta también a los sujetos que interactúan con el deportista, como son los entrenadores, árbitros, directivos, periodistas y espectadores.

Teniendo estos dos aspectos en cuenta, podemos decir que el Psicólogo de la Actividad Física y del Deporte desarrolla sus funciones en tres grandes campos de acción: el Deporte de Rendimiento, el Deporte de Base e Iniciación y el Deporte de Ocio, Salud y Tiempo Libre

 Deporte de Ocio, Salud y Tiempo Libre (Juego y Recreación)
Existe amplio reconocimiento de los efectos beneficiosos producidos por la actividad física regular y el ejercicio, tanto desde el punto de vista físico como psicológico.
Los beneficios psicológicos no sólo son evidentes para la población normal, sino también para el tratamiento de los trastornos psicológicos tales como la depresión, la ansiedad, el estrés, el abuso de alcohol o de sustancias, etc. De igual forma, la práctica habitual de ejercicio físico puede resultar de utilidad en la prevención de trastornos psicológicos. Con este fin, se han elaborado y puesto en marcha distintos programas de actividad física con fines terapéuticos y de salud, contemplando la necesidad de evitar el fenómeno de abandono y facilitar la iniciación y la adherencia a los mismos; tareas que incumben plenamente al ámbito profesional de la Psicología.
Por otra parte, en esta área la intervención profesional de los psicólogos incluye las tareas destinadas a optimizar el desarrollo psicosocial de los niños y adolescentes a través de dos métodos globales: la mejora de la formación de los agentes psicosociales (padres y entrenadores fundamentalmente), y proporcionar a niños y jóvenes las estrategias más adecuadas para la valoración de sus logros, de acuerdo con la etapa evolutiva en que se encuentren.

En relación a la salud, se constata que en las organizaciones, los programas de actividad física incrementan la cohesión y satisfacción de sus miembros y facilitan conductas laborales positivas (aumento de la productividad, disminución del absentismo y de los días de baja por enfermedad). Además la práctica de la actividad física está fuertemente asociada con la reducción de los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares, y en general de la morbilidad y mortalidad.

En síntesis, las funciones del Psicólogo de la Actividad Física y del Deporte en cuanto al ocio, salud y tiempo libre, girarán en torno a dos grandes ejes:
1. El conocimiento de los efectos psicológicos que puede comportar la realización de actividades físico-deportivas.
2. El conocimiento de los factores psicológicos implicados en la realización de dicha actividad.
Con el fin de conseguir una mayor operatividad y especificidad en la intervención, el tipo de población a quien va dirigido el Deporte de Juego y Recreación, se puede clasificar como sigue:
• Población común sedentaria.
• Población común con hábitos de salud y ocio adecuados.
• Población infantil y juvenil de iniciación.
• Población con necesidades especiales: tercera edad, minusvalías.
• Población en tiempo de ocio: turistas, ocio urbano, ocio rural,...
• Población con trastornos psicológicos.
• Población con alta incidencia de conductas de riesgo (prevención e intervención).